Beneficios de la lactancia materna: ¡Nutrición para tu bebé!

La leche materna es el alimento ideal para tu bebé durante los primeros 6 meses y la mejor base posible para una vida saludable. La leche materna ayuda a proteger a los niños contra la diarrea, las infecciones de oído, las infecciones respiratorias y las enfermedades alérgicas.

Los efectos protectores de la leche materna van mucho más allá de los efectos inmediatos durante la infancia y la niñez. Se cree que la lactancia también juega un papel en la disminución del riesgo de padecer algunas enfermedades importantes más adelante, como obesidad, diabetes, enfermedades cardiacas e hipertensión.

Importancia de la Lactancia Materna los primeros 1000 días

La importancia de la lactancia en los primeros 1000 días del bebé son los más importantes para asegurarle el comienzo sano para una vida sana. La alimentación durante este periodo de tiempo es una pieza clave para que tu hijo crezca y se convierta en un adulto saludable.

La Leche Materna es el mejor alimento para tu bebé porque tiene la calidad y proporción adecuada de proteínas, hidratos de carbono, grasas y otros nutrimentos que necesita para crecer y desarrollarse adecuadamente. Pero además de los beneficios que le aporta, amamantar también te protege de padecimientos futuros como el cáncer de mama y ovarios.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los bebés deben ser alimentados con Leche Materna de forma exclusiva durante los primeros seis meses de vida; posteriormente, la lactancia trabajará en conjunto con la Alimentación Complementaria para ayudarlo a crecer saludable.

Tu bebé adoptará rápidamente la postura para prenderse al pecho si es amamantado dentro de la primera hora posterior a su nacimiento, ya que sus reflejos están muy activos. Además, esto ayudará a que tu cuerpo inicie la producción de Leche Materna.

Descubrí lo que previene la Leche Materna a través del tiempo:

De 0 a 6 meses

• Infecciones gastrointestinales y respiratorias
• Infecciones urinarias
• Dermatitis atópica
• Alergia a los alimentos
• Problemas de crecimiento

Después del destete

• Infecciones gastrointestinales y respiratorias
• Enfermedad celiaca (alergia al gluten)
• Problemas de la vista

Durante toda su vida

• Sobrepeso y obesidad
• Diabetes tipo 1 y 2
• Leucemia y linfomas
• Enfermedad de Crohn

Se ha demostrado que la teta favorece el desarrollo cerebral y esto se refleja en un mejor rendimiento escolar a futuro. ¡No lo dudes, decile sí a la lactancia!

Contar con el respaldo de tu red de apoyo te ayudará a tener un exitoso periodo de lactancia, pero recordá que vos sos parte fundamental para lograrlo.

Beneficios para tu bebé

Imaginate tener un alimento que además de nutrirte, te diera calor, protección y una gran sensación de seguridad. Eso es lo que la lactancia materna le da a tu bebé, y mucho más. Acá te destacamos algunos de sus principales beneficios.

• Nutrición perfecta, ya que contiene la mezcla exacta de vitaminas, proteínas y grasas.
• Le da una conexión única contigo: sos la única que le puede dar pecho y tu bebé lo sabe. Para él, siempre vas a ser la persona que más lo cuida y más lo ama. Nada ni nadie te puede sustituir cuando lo amamantas; tu bebé y vos desarrollarán una relación y conexión únicas. Con solo darle pecho, le estás haciendo saber cuánto lo querés.
• Menos problemas digestivos, la leche materna se digiere más fácil y se aprovecha en su totalidad.
• Protección contra virus y bacterias, por su contenido en anticuerpos que los hace más resistentes a enfermedades e infecciones.
• Fortalecimiento del sistema inmune y disminución del riesgo de asma y alergias en el futuro.
• Menos infecciones respiratorias, de oído y episodios de diarrea; lo que se traduce en menos visitas al médico y/u hospitalizaciones.
• Más seguridad y confianza en sí mismo, gracias al vínculo y apego que se crea durante la lactancia.
• Previene la obesidad infantil, diabetes y algunos tipos de cáncer.
• La Asociación Americana de Pediatría, menciona que tiene un rol importante en la prevención de la Muerte Súbita del Lactante.
• Entre más tiempo dure la lactancia, menor será la probabilidad de que tenga caries durante su infancia.
• Es un alimento de fácil digestión.
• Ayuda a desarrollar su sentido del olfato y el gusto.

Beneficios para la mamá

• Producir leche materna quema calorías, por lo que puede ayudarte a perder el peso del embarazo mucho más rápido.
• Al amamantar, producís una hormona llamada oxitocina, la cual ayuda a que tu útero se contraiga y regrese a su estado normal, además de reducir el sangrado posparto.
• Disminuye el riesgo de padecer cáncer de mama y ovarios, al igual que la osteoporosis.
• Ayuda a tu salud emocional, al evitar los sentimientos de ansiedad y/o tristeza.
• Ahorro en la economía familiar, ya que no gastas en mamilas, esterilizadores y fórmula.
• Siempre está disponible y a la temperatura correcta.
• Promueve un microbiota saludable en tus senos: ¿Sabías que durante la lactancia tus senos desarrollan microorganismos vivos benéficos para ti? Estos se llaman probióticos y en conjunto con los prebióticos propios de la leche materna, conforman el microbiota del seno materno, que se aloja en las glándulas mamarias y en la leche materna que produces. Con su presencia, se pueden aminorar los malestares propios de la lactancia, como congestión, dolor e incluso mastitis.
• Favorece la relajación: Al amamantar produces la hormona prolactina, que estimula la producción de leche. Esta hormona tiene un efecto relajante en ti y en tu bebé.
• Genera sentimientos de apego y disminuye el riesgo de depresión post parto: Al amamantar se produce oxitocina, una hormona que se relaciona con el surgimiento de sentimientos como amor, felicidad y apego. Cuando esta hormona está elevada, disminuye el riesgo de que presentes depresión postparto.
• Es un alimento de fácil digestión.
• Disminuye el riesgo de contraer enfermedades respiratorias.

Beneficios compartidos

• Fomenta el apego entre tu bebé y tú
• Al amamantar, ayudas a crear seguridad, amor y confianza en su relación
• Disminuye el riesgo de contraer anemia
• Podrás satisfacer sus necesidades alimenticias rápidamente, si se encuentran fuera de casa
• Aunque no estés, podés seguirlo alimentando con leche materna al almacenarla y dejarla a disposición de quien esté a cargo de su cuidado

Es importante que sepas que la lactancia no debe doler. Si experimentás molestias, podría significar que tu pequeño tiene un mal agarre del pezón o un problema al succionar. Si es tu caso, consultá a tu profesional de la salud para prevenir futuros malestares como grietas o mastitis.

Una alimentación equilibrada, una adecuada hidratación y un multivitamínico prenatal pueden ayudarte a tener una lactancia materna exitosa.

¿Tu bebé puede dejar la lactancia por sí solo?

¿Tu bebé no quiere tomar más Leche Materna?, ¿comenzó a disminuir sus tomas o sólo juega cuando le das pecho? Es probable que quiera dejarlo.

Distintas organizaciones mundiales, entre ellas la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomiendan que los bebés se alimenten exclusivamente con leche materna durante sus primeros seis meses porque, tras nacer, los bebés no han desarrollado su sistema digestivo y sus órganos no están listos para procesar otro tipo de alimento líquido o sólido que no sea la Leche Materna.

La Leche Materna tiene la composición ideal con las proteínas, vitaminas y anticuerpos que tu bebé necesita durante esta primera etapa de crecimiento. Incluso se adapta a las necesidades específicas de tu bebé, ¡es maravilloso!

Una vez que los bebés cumplen los 6 meses de vida, pueden comenzar a consumir sus primeros alimentos sólidos sin necesidad de interrumpir las tomas de Leche Materna, de hecho, puede mantenerse hasta los 2 años e incluso hay mamás que la prolongan la lactancia durante más tiempo.

¿Es correcto dejar de amamantar de golpe?

Es posible que cuando empezás con esta etapa de alimentación complementaria, tu bebé no quiera tomar la teta y notes que no completa sus tomas o simplemente rechaza la teta. No te apures, es normal que los bebés también decidan que ya no quieren tomar la teta, sobre todo cuando han probado nuevos alimentos y están listos para explorar una nueva etapa. Es importante que respetes las señales cuando tu bebé ya no quiere seguir lactando y no lo obligues.

Ahora que tu bebé ha dejado de tomar leche materna, asegurate de que se hidrate correctamente. A los 6 meses, al igual que con el agua, tu bebé está listo para tomar jugo en pequeñas cantidades. Debes incorporar, poco a poco, otros líquidos como agua y jugos para que tu bebé se hidrate adecuadamente. Evitá las bebidas con alto contenido de azúcar y conservantes.

El destete de un bebé, o el momento en el que decidís dejar de darle la teta, es un momento personal y único para cada familia, por lo que la edad recomendable para hacerlo no existe, ya que depende de cada situación en específico.

La leche materna no pierde sus propiedades nutricionales en ningún momento, ya que, aunque cambia su composición con el tiempo, sigue brindando a bebés y niños de cualquier edad, ideales para su adecuado crecimiento y desarrollo.

Ahora que tu bebé ha empezado a consumir alimentos sólidos, es normal que notes que toma menos leche materna que antes, ya sea que reduzca el número de tomas al día o el tiempo que dura cada una. Hasta el año, la leche materna sigue siendo el alimento principal para tu pequeño, el que lo nutre en mayor proporción en comparación con los alimentos sólidos.

El momento ideal de dejar la lactancia

Recordá que la lactancia materna no solo es una forma de alimentación y nutrición para tu bebé, sino que implica un momento único de conexión emocional entre él y vos, por lo que se recomienda que el destete sea paulatino para que ambos no sufran durante el proceso.

Terminar con la lactancia materna es una decisión personal y los motivos que te lleven a hacerlo son únicos para cada familia. No dudes en acercarte a una asesora de lactancia o a una profesional de la salud para que te puedan ayudar a llevar a cabo este proceso de la manera más natural y fácil posible.

Calostros leche materna

Durante los últimos meses del embarazo, comienza la preparación y producción de la leche de inicio, mejor conocida como calostro. El calostro tiene un tono mucho más amarillo que la leche que conoces, y está especialmente diseñado para los primeros días de vida de tu bebé; ya que contiene:

• Factores inmunológicos, como los linfocitos, que se encargan de la producción de anticuerpos. Así como inmunoglobulinas que lo protegen contra virus, infecciones y toxinas.
• Proteínas, hasta 3 veces más que la leche materna madura (aquella que se produce una vez que se termina el calostro), las cuales lo ayudarán a tener un adecuado desarrollo físico y mental.
• Probióticos, que cuidan y mantienen una sana flora intestinal, protegiéndolo de enfermedades y futuras alergias.