Desarrollo fetal y cuidados en las 24 semanas de embarazo
Descubre el desarrollo de tu bebé y los cambios que tendrá tu cuerpo.
¿Ya podés sentir al bebé reaccionando a los ruidos y a tus caricias? Cuando se acerca el final del segundo trimestre lo empezás a experimentar, así que debés estar atenta. Conocé qué más sucede esta semana.
¿Querés cantarle una canción o contarle a tu bebé qué estás sintiendo en este momento? Podés hacerlo con tranquilidad porque llegaste a las 24 semanas de embarazo y ¡ya te escucha! Seguramente se enamorará de tu voz cada día más y podrás demostrarle cuánto lo amás por medio de las palabras y los sonidos.
¿Qué pasa con tu bebé?
Te queda poco para terminar el segundo trimestre, tu bebé tiene un tamaño aproximado de 20 cm y pesa algo más de 0.5 kg. Se van desarrollando todos los órganos de su cuerpo, sus pulmones ya están completamente formados, en un par de semanas comenzarán a prepararse para funcionar en el exterior.
¡Ya te escucha! Esto es maravilloso. Su oído interno está completamente desarrollado. Dile lo que estás haciendo, lo que ves, lo que escuchas, incluso lo que sentís. Desde el nacimiento, reconocerá tu voz, la de su padre, tal vez incluso la música que te gustaba escuchar durante su estancia temporal.
Cuando llegás a las 24 semanas las conexiones cerebrales del bebé se hacen más hábiles para recibir señales de sus órganos sensoriales receptores, almacenando gradualmente experiencias como los sabores de la comida que compartís con él y tu olor. Lograrás una conexión que seguirá incluso cuando ya haya nacido.
¡Reconoce el latido de tu corazón! Será su sonido preferido mientras esté en la barriga y aún después de nacer necesitará tenerlo cerca. Ya está acostumbrado a tu paisaje sonoro, tu respiración, incluso el gorgoteo de tu estómago.
¿Cómo te sentís?
¿Sabías que tu bebé puede ser cada vez más consciente de cómo te sentís? Si estás feliz, eufórica o emocionada, él se dará cuenta y ¡eso es genial! Su percepción puede estar bastante bien desarrollada, por lo que es importante que tus emociones sean positivas. Si sentís estrés del trabajo o la casa, no te preocupes, tratá de relajarte un poco y háblale a tu hijo. Te sentirás mucho mejor.
Al llegar a las 24 semanas podés experimentar más cambios en tu cuerpo y en tus emociones. A continuación, te contamos los más significativos:
Cambios en la piel
Debido a los cambios hormonales, es posible que aparezcan manchas oscuras en tu cuerpo y rostro debido a la estimulación de las células que producen la melanina. Algunas pueden ser:
- La mancha vertical en el vientre, también conocida como línea alba, puede verse a partir de este periodo. No sucede en todas las mamás gestantes porque todos los cuerpos son distintos.
- Las estrías suelen salir en este periodo generalmente en el vientre, nalgas y el pecho. Suelen desaparecer luego de que nazca el bebé. Esto puede variar en cada mujer, algunas se van y otras quedan permanentes. ¡No te asustes, es normal que esto suceda!
Mareos y pérdida del equilibrio
Tu barriga va creciendo de manera acelerada por lo que te costará aprender a balancear el peso y puede ser más fácil que pierdas el equilibrio. También podés experimentar mareos por el cambio de circulación. Intentá hacer las actividades pausadamente y debés tomar un descanso, no lo pienses y tumbate en la cama hasta que te sientas mejor.
Dificultad para dormir
Seguramente el tamaño de tu vientre no te permita encontrar la forma precisa para conciliar el sueño. Utiliza almohadas extra para hallar la posición ideal, por ejemplo, colocala entre las piernas y así mejorarás la postura con la que podrás descansar cómodamente.
Aliméntate adecuadamente
Debés incluir alimentos ricos en hierro dentro de tu dieta. ¿Por qué es importante? Muy sencillo, porque tu bebé debe satisfacer sus necesidades de este mineral y puede dejarte sin reservas y experimentar síntomas de anemia.
Dentro de los alimentos ricos en hierro encontrás la carne, especialmente la carne roja, las aves, el pescado y las yemas de huevo. Los guisantes, frijoles y las lentejas, la espinaca, las frutas secas y cereales fortificados también son fuente importante de vitaminas.
Los alimentos ricos en vitamina C, como las naranjas, los tomates y las fresas, ayudarán a tu cuerpo a absorber el hierro de fuentes no animales. En algunos casos, tu médico puede que quiera recetarte un suplemento de hierro, pero no empieces a tomarlo a menos que te lo hayan indicado. ¡No hagas las veces de doctor durante el embarazo!
Consejos
Si aún no sabés el sexo de tu bebé, estás próximo a averiguarlo y será un momento maravilloso. Algunas mamás realizan celebraciones especiales para revelar si tendrán un niño o una niña ¡podés intentarlo! A partir de este momento también es ideal que comiences a pensar cómo vas a decorar su cuarto y adaptar tu hogar para la llegada del nuevo miembro de la familia.
A medida que tu vientre va creciendo, algunas actividades se tornan difíciles de realizar como amarrarte los zapatos o agacharte para recoger algo del suelo. Pedile ayuda a tu pareja en ese momento.
¿Tenés pensado viajar? Es el momento de hacerlo porque luego se tornará agotador y estar en las mismas posiciones por largos periodos puede ser incómodo. Comunicále a tu médico los planes para estar alerta a cualquier cambio significativo.
Ya llegaste a las 24 semanas de embarazo y cada vez se acerca más el día de conocer a tu hijo. Disfrutá esta nueva etapa, hablá con tu bebé y decile lo feliz que te sentís porque desde ya tu vida cambió para siempre.
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