Cómo lidiar con los padres que juzgan.

• ¿Vos pediste algún consejo?

Si no lo hiciste, entonces podés callarlos amablemente. Para lidiar con consejos no pedidos, podés decir lo que estás haciendo por tu recién nacido y explicar que solamente querés apoyo y no opiniones.  Obtené consejos para lidiar con preguntas no deseadas sobre la lactancia acá.

• Ser selectiva al momento de hacer preguntas sobre bebés

Si vos pediste un consejo, pero no te gusta la respuesta, en ese caso no podés culpar a la otra persona por responderte. Pensá sabiamente a quién hacerle ciertas preguntas sobre bebés. Por ejemplo, si se trata de consejos sobre lactancia, tal vez sea mejor preguntarle a una amiga cercana que amamantó en lugar de hablar con una hermana que usó mamadera.

• Confiá en tu intuición materna

Confiá en tu intuición y consultá con tu médico sobre cualquier consejo que te den y del cual no estés segura. Esto podría ser especialmente útil si sentís que el consejo de algún miembro de tu familia es anticuado u obsoleto. Seguí las recomendaciones de tu médico para anular cualquier opinión no deseada. Podés decir “en realidad, le consulté eso a mi médico y me aconsejó no hacerlo así”.

• ¿Es posible que estés malinterpretando los consejos?

Esto es totalmente posible si te estás comunicando por mensajitos de texto, en foros en línea o por medio de publicaciones en redes sociales. Ante la falta del lenguaje corporal, la inflexión y la entonación, es posible que el mensaje de malinterprete: podés estas dándole cierto significado a una opinión que en realidad quería decir otra cosa. Si no estás segura, pedí que te aclaren lo que quieren decir. Si tenés dudas, dejá la conversación y confirmalo con una charla cara a cara.

• ¿Se trata de un típico caso de avergonzar a las mamás?

A veces, no se trata un mensaje malinterpretado: avergonzar a las madres es una práctica común en la comunidad en línea, y estar en el lugar de la persona que es criticada puede ser muy desagradable. Ya sea que el atacante del otro lado de la pantalla no se sienta cómodo con sus propias decisiones parentales, que sienta celos, enojo o frustración, todo es desagradable e innecesario. Si te sucede esto en línea, no respondas. Borrá tu publicación para evitar que más personas lean la conversación e intentá no leer más comentarios. Y, tan difícil como pueda ser, mantené estos comentarios en perspectiva. Son ellos los que tienen el problema, no vos.

• ¿Y vos estás juzgando a otros padres?

Por último, retrocedé un paso y preguntate a vos misma si estás juzgando. Si es así, es tiempo de dejar de juzgar a otras madres y padres. Todos estamos intentando hacer lo mejor que podemos y vamos a cuidar a nuestros hijos de formas diferentes. Es mucho más sano apoyar a otros padres, ya sean familia, amigos o nuevos miembros del grupo de mamás.