Lista de hospital: ¿Qué llevar en el bolso para el parto?
Listo tu bolso para el parto con lo imprescindible. Averiguá qué llevar contigo en este día tan importante.
Antes de que llegue el bebé, es fundamental que te prepares con los elementos adecuados para su llegada. Estos consejos pueden serte útiles para estar lista para ir al hospital cuando llegue el momento del parto.
¡Estás en el último trimestre de tu embarazo y seguramente la emoción y los nervios están a flor de piel! Te sugerimos tener estas cosas listas antes de la llegada de tu bebé para que estés completamente preparada.
La seguridad, ante todo
Entendemos que no vas a querer separarte de tu bebé, pero es clave que en la lista de cosas para él incluyas una silla de auto para llevarlo a casa. Colocala en el asiento trasero y asegurate de que esté correctamente instalada. ¡La seguridad de tu pequeño es lo más importante!
Asegura los apoyos necesarios
Ser mamá es una tarea difícil y no tenés que hacerlo sola todo el tiempo. Considerá pedir ayuda anticipada de tus familiares o contratar los servicios de una doula. Tené en cuenta a alguien que te pueda dar apoyo en esta nueva etapa para que puedas conservar energía y recuperarte paso a paso.
¡Maleta para el parto lista!
Primero, elaborá una lista completa de cosas para el bebé y para vos en el hospital. Olvidate de empacar liviano, se trata de empacar de manera adecuada. Si hay un momento en el que tenés que estar preparada, es cuando vas a dar a luz a un nuevo ser humano.
Ahora, ¿qué llevar en la pañalera de tu bebé para el hospital? Tomá nota:
- Una bata copada y medias son ideales para pasear por el pabellón de maternidad.
- Zapatillas o chanclas son clave para cuando te toque ir al baño.
- Ropa de maternidad cómoda y suelta o camisetas viejas. Llevá algunas de repuesto, por las dudas. Consejo: las remeras con botones adelante son re útiles para la lactancia.
- En la valija de mamá para el parto, agregá toallas porque tener las que usás en casa ahí es una buena idea.
- Bombachas grandotas. Las más cómodas son las de algodón que llegan hasta la cintura.
- Un par de corpiños de lactancia y bocha de protectores mamarios.
- No te olvides de anotar los datos de contacto de un asesor de lactancia o del servicio de apoyo para amamantar, por si te cuesta un poco al principio.
- Si estás pensando en un parto en el agua, quizás quieras llevar algo para usar en la pileta.
- Snacks saludables. La máquina expendedora puede ser el plan B.
- En la pañalera para el hospital, meté ropa cómoda para volver a casa y una bolsa para la ropa sucia.
- Frascos con tus cosmetiquitos de viaje, toallitas para la cara, shampoo en seco, vinchas para el pelo, bálsamo para los labios y un cepillo de dientes. Sumá toallitas femeninas, crema hidratante, cepillo de dientes y pasta dental.
- Traé tu almohada para amamantar. ¡Que sea de color llamativo así no se pierde!
- Antifaces y tapones para los oídos, un atomizador de agua y un ventilador portátil si es verano.
- No te olvides del celu y la cámara, para contarle a tus amigos y familia las buenas nuevas y grabar esos momentos únicos.
- Pensá en llevar música. Algunos hospis tienen reproductores de CD. Si no, armá tu propia mini playlist.
- Considerá llevar libros y revistas que te entretengan mientras esperás.
- Meté una libreta y un birome. Van a ser útiles para anotar los horarios de las tomas.
- No olvides tus papeles de maternidad con tu plan de parto y tus datos médicos. Ahora es cuando los vas a necesitar.
- Un par de conjuntitos para el bebé (2 o 3 mamelucos y 2 o 3 bodys, dependiendo de la época), medias, zapatitos y abrigo si es invierno, una frazada, 1 o 2 paquetes de pañales, toallitas húmedas, algodón, muselinas y manoplas para el bebé.
- Un cable cargador largo o una extensión, por si las tomas de corriente están lejos.
- Comprá una valija grande para el hospital. ¡Para meter todo esto!
- Llevá tu tarjeta de seguro médico y cualquier otro papel importante.
Con tu valija ya lista con la lista de cosas para el bebé en el hospital, necesitás saber cuándo estás lista para parir. ¡Éxitos!
Tranquilos, esto es sólo un simulacro
Practicá cómo sería ir al hospital, calculá cuánto tiempo te lleva llegar y tené en cuenta las precauciones que debés tener. Además, asegurate de tener a mano información sobre opciones de transporte o cualquier tipo de asistencia en caso de que tu bebé ya esté en camino. La clave es estar preparada para cualquier eventualidad y tener un plan bien pensado. ¡Cuidate mucho y que todo salga genial!
¡Cuna lista!
Si tenés planeado compartir el cuarto con tu bebé y practicar el colecho, asegurate de tener una cuna especial lista para cuando tu bebé llegue a casa. Es fundamental contar con un espacio seguro y cómodo para que ambos descansen plácidamente. ¡Prepará con cariño ese rinconcito especial para tu pequeño!
Todo limpio
Asegurate de que tu casa esté impecable antes de que llegue tu bebé. Además, lavá toda la ropa que tenés planeado llevar para ti y tu bebé durante su estancia en el hospital. Mantener un ambiente limpio y tener todo listo contribuirá a que la llegada de tu pequeño sea aún más acogedora y tranquila. ¡Prepará todo con amor y anticipación!
Algunos hospitales tienen la opción de...
- Ponerle aros a tu bebé. Si estás de acuerdo con esa decisión, averiguá si el hospital ofrece ese servicio para que puedas llevarlos contigo y tu bebé pueda salir del hospital con ellos puestos.
- Registrar a tu bebé en ese mismo momento; si ya tienes decidido el nombre, averiguá los requisitos necesarios para realizar el trámite. Es conveniente estar informada sobre estos procesos para que todo salga según tus preferencias y necesidades. ¡Preparate con antelación para ese emocionante momento!
Recordá que cada mujer es única y algunos de estos elementos pueden no ser necesarios para vos. Sin embargo, esta lista es un buen punto de partida para empacar tu maleta para el hospital. Si tenés alguna pregunta o duda, no dudes en hablar con tu obstetra antes del parto. Cada experiencia es diferente, y es importante asegurarte de que te sientas cómoda y preparada para recibir a tu bebé. ¡No dudes en buscar el consejo personalizado que necesitás!
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