¿Niños bilingües? ¡Yes!

¡Así es! A los 4 meses puede distinguir cuando se le habla en diferentes idiomas y comprender el significado de palabras y frases. A los 6 meses, el balbuceo ya tiene el acento de su lengua materna. A los 8 meses de vida, el bebé puede reproducir, con exactitud, sonidos de cualquier idioma.
 
Por eso, cuanto antes esté expuesto a otros idiomas más fácil le va a resultar aprender una segunda lengua, simultáneamente y de forma natural, sin esfuerzo, logrando una excelente pronunciación.
 
El cerebro de los bebés está listo para aprender un idioma. Los bebés nacen con millones de células en el cerebro, las cuales controlan el lenguaje. Estas células se conectan con otras células al principio de la vida. A su vez, estas células hacen conexiones con otras en el cerebro formando "caminos." Cuando los bebés escuchan hablar a los adultos se fortalecen los "caminos" que tienen que ver con el lenguaje en el cerebro.
 
Los caminos que se forman en el cerebro y que tienen que ver con el lenguaje están bien consolidados recién cuando el niño cumple los diez años. Es más difícil aprender otro idioma después de que se cumple los diez años, ya que el cerebro está "conectado" para aprender el idioma que se escuchó por primera vez.
 
 
Hablale a tu bebé
 
Los bebés aprenden el idioma cuando las personas a su alrededor lo hablan, pudiendo oír el sonido de muchos idiomas. Ellos pueden escuchar otros idiomas además del que hablan sus padres. Los bebés de tres meses saben muchísimos sonidos.
 
Si no sabés otro idioma, buscá a algún pariente o amigo que pueda hablarle en otra lengua, para que se acostumbre a los sonidos, palabras y frases. Los niños aprenden a escuchar las palabras mucho antes de que puedan aprender a hablar. Esta forma de escuchar los ayuda a aprender el idioma.